La verdad es que hay que reconocer que el Ayuntamiento de Alicante es consecuente con sus principios. De nuevo va a dejar de lado la participación ciudadana y va a emprender una cuestión tan importante para nuestra ciudad como el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) sin escuchar a los vecinos y vecinas que tanto tenemos que aportar.
Ante la petición de unas cincuenta asociaciones y plataformas alicantinas de que se ampliara el plazo para presentar propuestas, nuestro Ayuntamiento ha respondido: el 7 de octubre se abre el periodo de alegaciones y su duración será de un mes. Es decir, no ha movido su planteamiento inicial ni un ápice.
Además, en aquellas reuniones "informativas y participativas" que nuestro queridísimo Ayuntamiento tuvo a bien organizar para "dar a conocer el PMUS" no se habló en ningún momento de plazos ni coste y ahora resulta que sí que los hay: 10 años para su implantación y 72 millones de euros, que claro está no sabemos cómo se van a presupuestar.
En fin, esto es lo que tenemos...